La protección inmunitaria que ofrece un esquema completo de vacunación ante variantes de preocupación de omicrón, de covid-19, dura entre 6 y 8 meses, por tener mayor capacidad de evadir la respuesta inmunológica, advirtió la Organización Panamericana de la Salud (OPS) tras aclarar que las vacunas siguen siendo la mejor opción para evitar enfermedad grave y decesos.
“Hasta el momento se ha podido demostrar que los anticuerpos contra el virus, incluyendo omicrón y sus sublinajes empiezan a decaer, más o menos, entre 6 y 8 meses después de la vacunación, y para algunas variantes, previas, se ha llegado a detectar hasta por un año”, dijo Jairo Méndez Rico, asesor en enfermedades virales emergentes de la OPS.
“En cuanto a la inmunidad ante las nuevas variantes es importante mencionar que la respuesta inmune y la protección pueden variar de un individuo a otro, y depende de muchos factores, incluyendo, no sólo el tipo de vacuna utilizada, sino también del contacto previo con el virus y algunos factores genéticos que son propios de cada individuo”, detalló.
Méndez Rico dejó en claro que aun cuando disminuya la respuesta inmunológica de las vacunas, los seres humanos desarrollan mecanismos de protección. “Sin embargo, esto no quiere decir que al decaer los anticuerpos no sigamos protegidos. Las vacunas estimulan otros mecanismos de protección, incluyendo lo que se denomina respuesta inmune-celular, con una memoria a largo plazo que resulta muy eficiente para proteger, principalmente, las formas graves de la enfermedad, incluso la muerte”.
“Por esta razón, aunque pueden de existir reinfección, gracias a un esquema completo de vacunación, la posibilidad de tener una enfermedad grave, letal, es mucho más baja”, añadió. El regreso a la normalidad, actividades multitudinarias, así como el uso incorrecto de cubrebocas, mascarillas, han propiciado, dijo, esta capacidad del virus para modificarse y evolucionar. “Dada la capacidad de transmisión y dispersión que hemos visto siempre en Omicrón, el virus ha tenido oportunidad, de hecho, de acumular una gran cantidad de cambios. En este momento se han descrito hasta 80 sublinajes y linajes hermanos clasificados todos dentro de esta variante Omicrón”.
“De todos estos sublinajes, algunos sobresalen, por supuesto, por su rápida expansión y hacinación, y aquí podemos incluir, principalmente, BA.2, BA.4 y BA.5”, detalló en conferencia de prensa. “En este momento BA.4 y BA.5 constituyen cerca del 68 por ciento de los virus que se han secuenciado a nivel global y seguramente serán predominantes en todas las regiones, durante las próximas semanas. “Sin embargo, como debemos repetir, dado los diferentes escenarios no tenemos evidencia para pensar que alguno de esos linajes, en realidad, tenga un impacto adicional, más allá del que ya hemos observado para Omicrón. Experimentos in vitro también demuestran que no son más agresivos en comparación a la variante de preocupación que han circulado previamente como Delta, por ejemplo”, añadió Jairo Méndez Rico, asesor en enfermedades virales emergentes de la OPS.
En cuanto a la inmunidad ante las nuevas variantes es importante mencionar que la respuesta inmune y la protección pueden variar de un individuo a otro, y depende de muchos factores, incluyendo no sólo el tipo de vacuna utilizada, sino también del contacto previo con el virus y algunos factores genéticos que son propios de cada individuo. Hasta el momento se ha podido demostrar que los anticuerpos contra el virus, incluyendo omicrón y sublinajes empiezan a decaer más o menos entre 6 y 8 meses meses después de la vacunación, y para algunas variantes, previas, se ha llegado a detectar hasta por un año. Sin embargo, esto no quiere decir que al decaer los anticuerpos no sigamos protegidos.
Las vacunas estimulan otros mecanismos de protección, incluyendo lo que se denomina respuesta inmune celular, con una memoria a largo plazo que resulta muy eficiente para proteger, principalmente, las formas graves de la enfermedad, incluso la muerte . Por esta razón, aunque pueden de existir reinfección, gracias a un esquema completo de vacunación tener una enfermedad grave, letal, es mucho más baja.
